MEDICINA

 

Anemias 

Al menos 1/3 de todas las mujeres tienen, han tenido o van a tener anemia, esta frecuencia inusitada ha creado un trasfondo imaginativo en el que parece que todo el mundo sabe bastante sobre ellas, y la realidad es que circulan muchas falacias que pretendiendo explicar el fenómeno anémico lo complican y confunden.

De forma correcta la anemia solo se puede determinar con la medición de la hemoglobina en la mujer "NO ANÉMICA" este valor será igual o superior a 12,2 gr./dl. Ahora bien incorrectamente se piensa que la anemia se puede evaluar por el numero de hematíes de forma que se interpreta que tener 5.000.000 de hematíes es tener mucha sangre y tener 3.000.000 supone una situación anémica. Esto es incorrecto y se puede entender mejor si comparamos el numero de hematíes a las monedas de nuestra cartera, pues podemos tener muchas monedas (calderilla) sin que apenas suponga cierta cantidad de dinero y al contrario unas pocas monedas de gran valor pueden suponer una cantidad apreciable, de igual modo en la sangre no es importante solo el numero de hematíes si no que es preciso valorar el tamaño de estos y su contenido en hemoglobina, como ejemplo exponemos 5 casos reales, con el mismo nº de hematíes y que sin embargo indican situaciones muy diferentes. 

En el caso 1 las monedas (Hematíes) son de tamaño muy pequeño y contenido muy bajo de hemoglobina y en el caso 5 el tamaño es muy elevado y la cantidad de hemoglobina por hematíe es muy grande, ello hace que con el mismo numero de hematíes la paciente 5 tiene un saldo (hemoglobina) próximo al doble del caso 1.

 Otro error ha sido el asociar la anemia con la dieta, hasta el punto de que las madres obligan a sus hijas a comer en exceso, intentando evitar la anemia, pero no se dan cuenta que esta es rara en las personas delgadas y muy frecuente en jovencitas obesas. Una dieta hipocalórica variada y con un mínimo de proteínas y minerales jamás será causante de una anemia. 

Hay que recordar además que las anemias no son enfermedades o procesos primarios sino que lo mas habitual es que sean la consecuencia de otra enfermedad. La habilidad del medico es averiguar cual es el proceso primario ya que sin curar este jamás se conseguirá remontar la anemia de una forma permanente. Es preciso saber también que solo el 11% de todas las anemias responden responden al tratamiento con hierro como único fármaco, por ello es muy conveniente evaluar el perfil anémico y ver que componentes y en que proporciones se deben prescribir.    

El perfil ferrico nos ayudará a saber si el paciente absorbe bien el hierro oral (fe > de 100) si su organismo sigue requiriendo dosis mantenidas de hierro (Transferrina > 330) y si las reservas férrica ya se han repuesto (ferritina >20).

En resumen, el enfoque de una anemia se basa en la valoración de un buen hemograma, en el despistaje del proceso primario y en la correcta compensación de los parámetros alternados del perfil anémico. Este perfil también nos permite valorar la respuesta del paciente al tratamiento suministrado y en ocasiones nos indica la necesidad de pasar un tratamiento parenteral al comprobarse una mala absorción oral de los medicamentos suministrados.  

     

Javier Muñoz Agias